viernes, 27 de diciembre de 2013

El castillo encantado de Glamis (Escocia)


El castillo de Glamis, se encuentra en el condado escocés de Angus, alli se cuenta una leyenda sobre sus antiguos moradores. El tercer conde de Stratmore tuvo varios hijos, pero uno de ellos nació deforme, algo no humano.
El conde le encerró en la más oscura y siniestra de sus mazmorras para que nadie pudiera verlo jamás, haciendo después tapiar la entrada. Se dice que el ser, para subsistir, llegó a comerse sus propios brazos.
Sir Patrick Lyon, tercer conde de Strathmore y propietario del Castillo de Glamis, le gustaba contar una anécdota muy peculiar:
Decía el conde que una noche de sábado en la que estaba jugando a las cartas con su amigo el Conde de Crawford, un criado se atrevió de advertirle de que se acercaba el sabbath.
Enfadado por la interrupción, el conde Patrick respondió que seguirían jugando y que si el demonio deseaba unirse a ellos sería bien recibido. A medianoche el demonio en persona se presentó en la sala donde aceptó la invitación. Jugaron una larga partida, y en el transcurso de la misma los dos condes perdieron su alma, quedando condenados a permanecer en aquella habitación desde el día de su muerte hasta el Juicio Final jugando a las cartas.
Esta historia siempre ponía los pelos de punta al interlocutor del Conde, acrecentando su aura de jugador borracho y disoluto, y, sobre todo, la secular fama del Castillo de Glamis como lugar maldito.
Situado en el Valle de Strathmore, en Tayside, Escocia, el Castillo de Glamis pertenece a la familia Lyon desde 1372. La primera noticia de su existencia data de 1034, año en el cual el rey Malcolm II fue asesinado entre sus muros por un grupo de rebeldes. Se dice que mientras huían en medio de la noche, los asesinos se ahogaron en el cercano lago Forfar al quebrarse la superficie helada de este.
Algunos afirman que es con el asesinato del rey cuando comienza la historia sobrenatural del castillo. Otros sitúan su inicio en 1372, con la llegada de la familia Lyon desde Forteviot, pues los Lyon habrían traído con ellos un cáliz acerca del cual se decía que si abandonaba alguna vez Forteviot acarrearía la desgracia sobre la familia.
De ser cierto, la maldición del cáliz tardaría aún 150 años en manifestarse. En 1538 Janet Douglas, Lady Glamis por matrimonio, era injustamente condenada a morir en la hoguera, bajo la acusación de emplear la brujería en contra del rey Jacobo V de Escocia.
El castillo pasó a poder del rey, hasta que a su muerte fue devuelto a los Lyon.
Aseguran que desde entonces el fantasma de Lady Glamis es visto con frecuencia por sus pasillos y capilla, bajo la forma de una “dama blanca” o una “dama gris”.
Pero el de Lady Glamis no es el único fantasma que habita el castillo. También han sido vistos una anciana portando un fardo, un hombre de barba canosa que fue un antiguo prisionero fallecido de hambre en el sótano, un paje negro con ropajes a la manera del siglo XVII, un ser demasiado delgado al cual se le llamó Jack el Corredor y una mujer torturada a la que arrancaron la lengua.
En una ocasión, un huésped vio aparecer una cara pálida y ojerosa al otro lado de la ventana de su habitación. El rostro desapareció como si algo tirase de él, y entonces se escucharon unos chillidos horribles.
Otros huéspedes oían unos golpes en las paredes que no les dejaban dormir, y cuentan que esto le sucedió también a lady Elizabeth Bowes-Lyon, la futura reina madre de la actual Isabel II de Inglaterra, quien pasó su infancia en el castillo.
En algún lugar del sótano hay una habitación secreta donde el conde enterraba vivos a sus enemigos.
En 1957 un trabajador abandonó su trabajo aterrorizado porque todas las noches escuchaba en la habitación contigua a la suya a Sir Patrick y el conde Crawford, los jugadores de cartas, arrojar unos dados, golpear el suelo con los pies y lanzar horribles gritos.
Y otro de los misterios del castillo es que desde fuera  se cuentan  mas ventanas de las que  se pueden ver desde el interior.
Pero el mayor misterio del castillo es un oscuro secreto familiar que cada conde debe transmitir al próximo conde cuando este cumple 21 años.
Claude Bowes-Lyon, decimotercer conde, muerto en 1904, vivió toda su vida obsesionado por el misterio. Se cuenta que en una ocasión un amigo le preguntó,  y el conde respondió “si te contara la verdadera naturaleza del secreto de familia te postrarías de rodillas y darías gracias a Dios de que no fuera el tuyo”.
Se cree que el enigma tiene relación con una habitación oculta. Un obrero la encontró por accidente en 1880 e  inmediatamente el conde le envió a Australia con una importante suma de dinero para que no volviera ni contara  nunca nada.

domingo, 22 de diciembre de 2013

Vysehrad, la colina embrujada de Praga

El diablo, san Lucas, san Longino, un cementerio vivo, treinta y cuatro fantasmas, y mil leyendas más que forman parte de la más enraizada tradición del país… La mítica princesa pagana, Libuse, hija del padre de la patria checa, Cech, eligió una colina sobre la que se divisa el río Moldava y lanzó una profecía que perdura aún entre la tierra y el cielo de Praga: “Aquí nacerá una ciudad cuya fama y gloria llegará hasta las estrellas”. Así fue y así lo cuentan las leyendas checas. Pero en realidad, entre aquellas rocas, nació también uno de los lugares más enigmáticos y simbólicos que hay en toda Europa: Vysehrad. Es difícil entender la historia de este lugar sin pasear entre sus calles y árboles, sin divisar su iglesia negra y su jardín de tumbas, el decorado adecuado para divagar entre los dos mundos. Libuse, marcó el enclave de una fortaleza que ha sido testigo de luchas de poder, morada de monarcas y escenario de cruentas batallas en las que el objetivo era asegurar el control de un bastión estratégico en las guerras checas.
La muerte se ha abierto paso entre sus murallas y ha dado lugar a muchas leyendas. En lo que parecen ser los restos de una atalaya medieval, conocida como el Baño de Libuse, era donde la princesa se veía con sus amantes, que una vez usados eran arrojados al río. Dicen también que entre sus rocas duerme un ejército de caballeros que volverán a la vida portando sus armas cuando la nación checa esté en peligro. Una vez al año, un león sale de la roca y lanza un fuerte rugido a modo de advertencia sobre la necesidad de auxilio. Al no recibir respuesta, el animal vuelve a su sueño eterno y con él, el ejército de caballeros que, entre otros, está formado por todos aquellos que perecieron debajo de la enigmática roca, ahogados en el Moldava.
No es la única leyenda que habla de espectros en este lugar. Exactamente son treinta y cuatro los fantasmas que habitan en la fortaleza. Muchos escritores checos han escrito sobre estos relatos que forman parte de la cultura de la ciudad. Popelka Biliánova, editó un libro que se titula Los cuentos de Vysehrad. Nadie conoce como ella los secretos de la colina, ya que en su tiempo libre subía a su cementerio a pasear entre sus tumbas. Su extraño carácter, dicen, quedó plasmado en sus relatos. De entre los treinta y cuatro espectros de la colina, los checos hablan de veinte damas blancas, entre ellas la princesa Libuse. Se aparecen en lo que era el palacio de los reyes. Un horticultor fue el primero en verlas, junto a sus hortalizas, andando sobre ellas. A la mañana siguiente, todas las plantas estaban con los tallos aplastados sin que nunca más volvieran a erguirse.
La Doncella Negra es otro de los fantasmas que se dice que habita Vysehrad. Junto a los restos de la muralla de Spicka. Se le oye gemir y sollozar, también exhala un aliento helador que hace que a su lado tampoco crezcan las plantas. La imagen más terrorífica de los fantasmas de la fortaleza es la de los nueve perros negros e ígneos que se aparecen entre sus calles. El más conocido es un can negro con una cadena de fuego que se desboca cuando la noche cae sobre Vysehrad y corre desde la rotonda de san Martín –antigua ermita– a la puerta de ladrillos. Su última visión, cuando desaparece, es ya convertido en una gran bola de fuego. Otra leyenda nos habla de un perro negro y de enormes ojos de fuego como guardián de un desconocido tesoro. Pero la más inverosímil de las imágenes es la de un can sin cabeza que acompaña a una carroza tirada por caballos sin cabeza y que dirige un cochero también sin cabeza. La narración asegura que a esta carroza infernal se la ve rodando sobre las murallas de la fortaleza. No acaba aquí la increíble historia espectral de la colina: dos arquitectos que fueron allí ahorcados intentan estrangular a los transeúntes que divisan; una rosa blanca, plantada entre sus jardines, es una sentencia de muerte: quien la encuentre y la toque, fallecerá; un baile de esqueletos se produce algunas noches junto a la rotonda de san Martín; un mayor francés merodea el castillo desde los tiempos de la ocupación gala en 1742. Todos estos espectros forman parte del universo del más allá que es Vysehrad. La columna del diablo Frente a la iglesia de san Pedro y san Pablo, en el jardín de Karlach, se halla partida en tres trozos la conocida como columna del diablo antes estuvo colocada en el propio templo y después en el cementerio que lo orilla.
Es un símbolo en el que se escenifica la guerra entre lo cristiano y lo pagano. Su origen, que no está definido, habla de que pudo ser soporte de la antigua iglesia citada siglos XI y XII, hasta que en 1503 se derrumbó dentro del edificio y quedó como reliquia. Otras teorías creen que la columna era un antiguo medidor de tiempo o pudo ser una picota medieval. Esta explicación entronca con lo que algunos historiadores opinan que es el inicio de Vysehrad: al llegar los eslavos a la colina encontraron restos de un poblado celta en el que se había construido un medidor de tiempo a través de grandes columnas. Sin embargo, la columna del diablo es otro episodio de misterio. Dicen que un poseso al que hubo que hacer un exorcismo sacó de su cuerpo un demonio, llamado Zardan, que reconoció que él había traído la columna desde Roma. Y es que el maligno apostó con un sacerdote de Vysehrad que era capaz de traer una columna de la basílica de san Pedro antes de que éste concluyera una misa. El cura, que contó con la ayuda del citado apóstol, consiguió que el diablo perdiera la apuesta, por lo que la arrojó con fuerza y la partió en tres. Dentro del templo hay un cuadro de origen gótico que escenifica la leyenda. Y hablando de cuadros, en san Pedro y san Pablo hubo una pintura de mayor relevancia aún: Nuestra Señora de las Lluvias, una obra del siglo XV.
El cuadro original, que se expone en la Galeria Nacional y que anteriormente estuvo colgado de las paredes de una iglesia que está debajo de Vysehrad, El Acatamiento de Nuestra Señora, representa a la Virgen amamantando al Niño Jesús. Su pintor, dicen que es el apóstol san Lucas. Otros le dan un origen menos relevante y apuntan a un cuadro pintado en Italia en el siglo XIV y traído después a Bohemia. En cualquier caso, la pintura fue venerada por miles de checos. Después de la Guerra de los Treinta Años (1648) y en pleno periodo de recatolización, el pueblo consideró que la pintura era milagrosa. Peregrinos de toda Chequia acudían hasta la iglesia a pedir protección a la Virgen.
Especialmente, el pueblo suplicaba para que cayera lluvia y hubiera buenas cosechas, de ahí su nombre. El emperador José II acabó con esta tradición después de más de un siglo de culto y prohibió que se continuara la milagrosa procesión.
El sarcófago y el cementerio. Un sarcófago que se conserva bajo un altar de la imponente iglesia de Vysehrad es otro enigma más de este lugar. El sarcófago de san Longino fue traído a Praga por el emperador Carlos IV. Otros dicen que proviene de la bóveda romana no conservada de la última etapa de los premislitas. El hecho es que en 1420 los husitas saquearon el castillo y sacaron el sarcófago del templo para arrojarlo al río Moldava. Dicen que el cuerpo del santo se hundió en las profundidades, mientras que el ataúd quedó flotando sobre las aguas. Desdicha e infortunio fue el destino de los que cometieron tal barbaridad. No pararon de ocurrir graves desgracias a todos los que intervinieron en el ultraje hasta que el sarcófago volvió a su enclave. Pero, aunque el ataúd de san Longino ocupa un lugar preferente en la historia de Vysehrad, nada en este lugar sería igual sin su cementerio. Allí están enterrados importantes artistas y científicos de la historia de la República Checa, como el arqueólogo Václav Krolmus, la escritora Bozena Nemcová, y los poetas Vitezslav Halek y Jan Neruda, entre otros.
Allí murieron, por ejemplo, muchos jesuitas que trataban a leprosos. Allí, la muerte se convierte en prosa negra. Lo hace a través de un jardín de mármol, en el que cada tumba o nicho es un trozo de tiempo detenido, una imagen, un pensamiento. Pasear por Vysehrad es distinto. Una iglesia alta y negra al fondo; decenas de bellas y extrañas esculturas que simbolizan la muerte a sus pies. Dos manos gigantes y retorcidas, una especie de duende sin sujeción o una alegórica muerte con capucha y sin rostro, son algunas de las tumbas del cementerio. Increíble lugar en el que toda la magia de la colina que se convirtió en fortaleza adquiere sentido.

sábado, 21 de diciembre de 2013

El revisor fantasma del expreso 421

¿Quien era el extraño personaje que anunció la tragedia 3 días antes?
El 3 de enero de 1944 se produjo en León, España, uno de los mayores accidentes ferroviarios de la historia. En el interior de un túnel, colisionaron un tren correo, una locomotora en maniobras y un tren de mercancías. Un terrible desastre que se sale de lo normal porque tres días antes un extraño revisor, al que nadie conocía y que ningún testigo pudo ver bien su rostro, anunció la tragedia.
El 2 de enero de 1944 por la tarde-noche, el tren expreso correo 421, una locomotora americana con otra locomotora auxiliar y 12 vagones, salió de Madrid con destino a La Coruña repleto de gente que retornaba a sus hogares tras las fiestas navideñas y muchos militares que regresaban de permiso. No hay número exacto, pero el número se estima entre 800 y 1.000 personas.
Al día siguiente, a mediodía, llegaba a Astorga, León, con dos horas de retraso. Llevaba dos locomotoras porque la principal no bastaba para frenar bien el largo convoy , pero algo no iba bien, y en la estación durante unos 10 minutos se revisaron las dos locomotoras, la auxiliar tenía una avería, que no la permitía continuar, todo un problema, ya que el correo debía llegar y el retraso ya era notable, así que se desenganchó la locomotora auxiliar y el convoy emprendió la marcha de nuevo con una sola locomotora, a pesar de las advertencias del maquinista titular Julio Fernández.
Pero al bajar el puerto, el tren comenzó a ganar velocidad de manera alarmante. Se saltó la estación de Albares de la Granja, incapaz de frenara, ante el estupor de los que esperaban en el andén y que describieron el tren como “un caballo desbocado”, y el terror de los que estaban dentro de él. Eran las 13:10 y el tren debía parar de nuevo en otra estación a 5 km, en Torre del Bierzo, así que el jefe de estación de Albares llamó por teléfono avisando a Torre. El responsable de Torre ordenó poner travesaños para frenar el ten, pero este iba tan rápido que no les dio tiempo y pasó ante ellos directo a la entrada del túnel número 20, donde unos operarios trabajaban con una locomotora tranquilamente, ajenos a lo que se les venía encima..
El convoy y la locomotora chocaron, y los operarios salieron despedidos, pero a pesar de eso, solo había algunos heridos, el expreso 421 había quedado encajonado en el interior del túnel. Tras el pánico inicial, la gente comenzó a reponerse sin saber que lo peor estaba por llegar.
El impacto había dañado las señales que debían avisar del bloqueo de la vida, y al ver la vía libre, el tren de mercancías 7742, de 27 vagones, se dirigía a toda máquina hacia el túnel 20 sin saber lo que le esperaba en el interior.
El impacto fue brutal, y los vagones llenos de personas en el interior del túnel se convirtieron en un infierno debido al impacto y al fuego de las calderas, quemando vivos a los pasajeros y haciendo que las armas de los soldaros se disparasen por el fuego en una escena dantesca. Otros testigos también afirmaron que no solo se dispararon por accidente, y es que muchos pasajeros al verse rodeados de llamas prefirieron quitarse la vida.
RENFE admitió 78 muertos y 75 heridos inicialmente, pero el goteo de cuerpos y restos carbonizados era incesante. El régimen franquista trató de maquillar el suceso y solo admitió unos 200 muertos, pero se estima que las victimas fueron entre 600 y 800, de hecho este accidente se consideró por muchos años como el accidente ferroviario con mayor número de muertos de la historia.
Pero es a partir de este terrible suceso cuando empieza la parte extraña de la historia, y es que 3 días antes, un hecho misterioso del que aún no hay explicación,
Pablo Herrero, un ciudadano muy respetado de la localidad de Astorga, el 9 de Enero fue a la guardia civil y declaró que el 31 de diciembre, 3 días antes de la tragedia, se montó en ese mismo tren en la estación de Valladolid, y allí se subió un extraño revisor con su capote ferroviario y una cesta en la mano, se colocó delante de los pasajeros y les dijo sin más ,que se había producido un accidente muy grave en los túneles de Torre del Bierzo y había muerto mucha gente que se dirigía a Galicia. Tras decir esto, dio media vuelta y se bajó del tren. Nadie lo volvió a ver por el andén, y los responsables de la estación no supieron decir que extraño personaje había anunciado el desastre 3 días antes.
Tras la declaración de varios testigos, que curiosamente no supieron decir que rasgos tenía el extraño revisor, el juez encargado del accidente ordena investigar a varios jefes de estación para identificar al misterioso personaje, pero la búsqueda no da resultado, y queda archivada tras demostrar que no hubo sabotaje, por lo que el “revisor fantasma”, como rápidamente fue apodado, no tuvo nada que ver en el accidente, al menos físicamente.
El túnel numero 20, escenario de la tragedia, fue demolido en 1987, y a día de hoy aún se sigue especulando con la identidad de ese revisor.

sábado, 7 de diciembre de 2013

Dioses fineses y otros seres mitológicos.


Allá por junio de 2010 hablamos de los dioses nórdicos,  pertenecientes  a todos  los países nórdicos, y en gran parte también de los bálticos y germánicos, pero en Finlandia además de todos estos dioses, tenían los suyos propios, a continuación un pequeño listado de los dioses, héroes y lugares de la mitología finesa.
Ahti o Ahto, es el dios de las profundidades y el que provee de peces las aguas.
Ajatar o Ajattara, es un malvado espíritu de los bosques
Akka, es el espíritu de una dama anciana
Äkräs es el dios de la fertilidad y protector de los vegetales
Antero Vipunen es un gigante muerto protector del conocimiento profundo y de la magia.
Hiisi es un demonio, en un principio evocaba un bosque sagrado para después convertirse en un goblin.
Iku Turso es un malvado monstruo marino.
Ilmarinen es un espíritu masculino del aire considerado como el gran herrero, es el constructor del cielo
Ilmatar es un espíritu femenino del aire, es hija de la sustancia primaveral y del espíritu creativo, esmadre de Väinämöinen en la obra maestra de la literatura finesa, el kalevala.
Jumala es una deidad  menor, en principio era el nombre dado  al cielo, al dios del cielo y al dios supremo, mas tarde al cielo se le dio el nombre de taivas y al dios del cielo el de Ukko. Jumala significa dios y es el nombre que se usaba para referirse al dios cristiano.
Kalevanponka es el hijo de Kaleva, es un héroe gigante segador de prados y bosques.
Kave esun antiguo dios del cielo, para después serlo del ciclo lunar, es el padre deVäinämöinen.
Kotitonttu es el dios el hogar
Kullervo es un antihéroe que Tolkien menciona en su obra el silmarillion.
Kuu es el dios de la luna
Lemminkäinen es un héroe al que todos temen y el no teme nada ni nadie.
Lempo es el espíritu de la fertilidad.
Louhi es la anfitriona del inframundo y la matriarca de Phjiola
Loviatar es la madre de las nueve enfermedades, es ciega e hija de Tuoni.
Luonnotar es la creadora femenina y un espíritu de la naturaleza.
Menninkäinen es un gnomo mágico.
Mielikki es la diosa del bosque, esposa de Tapio.
Nyyrikki es la diosa de la caza e hija de Tapio.
Näkki es un temible espíritu que habita en estanques, pozos y puentes.
Otso es el espíritu del oso
Pekko es el dios de los cultivos, de la cebada y de la cerveza.
Perkele es un diablo que en principio fue un dios del trueno, está relacionado con Thor y a llegada del cristianismo es cuando se convirtió en diablo.
Pellervo es el dios de la cosecha.
Pijatonttu es el tutor del patio.
Piru es un espíritu demoniaco.
Päivatär es la diosa del día.
Rahko es un dios de la región de Karelia y se encargaba del tiempo cronológico.
Surma es la personificación de la muerte violenta.
Saunatonttu es el tutor protector de la sauna.
Tapio es el dios del bosque.
Tellervo es la diosa del bosque, hija de Tapio y de Mielikki.
Tonttu es un elfo bueno, patrón de la tierra cultivada y poseedor del lote.
Tuonetar es la amante de Tuoni,  también la hija de Tuoni lleva  este  nombre.
Tuoni es la personificación de la muerte.

Turisas es un dios de la guerra, se cree que este no es realmente un dios propio fines sino el nombre que daban al dios nórdico Tyr.
Tuulikki es hija de Tapio y de Mielikki, hermana de Tellervo, es la diosa de los animales.
Ukko es el dios del cielo y del trueno, socio de Thor.
Väinämöinen es un sabio anciano con una potente y mágica voz, es el protagonista del Kalevala.
Vellamo es la esposa de Ahti, la diosa del mar, los lagos y las tormentas.
Vendemo es la diosa Karelia del agua.
Algunos de los lugares eran estos :
Kyöpelinvuori, también llamado Raatikko, es al sitio donde iban las vírgenes al morir y donde las hechiceras se reunian.
Tuonela es la morada  de los muertos,  el inframundo.
Aarnivalkea es la llama eterna que indica la ubicación de un tesoro.
Lintukoto es el lugar donde los pájaros migraban en invierno, es un lugar feliz

viernes, 6 de diciembre de 2013

La maldición del coche de James Dean

James Dean (1931-1955) fue un actor que alcanzó la fama con tan solo tres películas, aunque  participó  en un total de siete.
Su gran pasión eran los coches deportivos y participar en carreras.
Su primer coche de carreras lo compró en 1953 mientras rodaba “al este del edén”, era  un MG TD que posteriormente cambió por un Porsche 356 Speedster.
En 1955, en el mes de marzo quedó segundo en “Palm Springs road races”, también fue segundo en el torneo e Barkersfield en el mes de mayo, y a final de este  mes rompió el motor de su coche en la carrera “Santa Monica road races”.
El Porsche de Dean era un modelo enfocado al mercado aficionado a las carreras que tan en auge  estaba en la época.
Mientras rodaba “rebelde sin causa”, cambió este coche por otro modelo también de Porsche, el 550 spyder.
Este coche se lo personalizó George Barris con un “130”.
Bill Hickman, amigo personal de Dean, le puso el nombre de “little bastard” al coche, Bill también era instructor de Dean y especialista en las escenas peligrosas de sus películas.
La muerte de Dean se produjo el 30 de septiembre de 1955, iba de camino a las carreras de Salinas, tras el rodaje de gigante. Su mecánico Rolf Wütherich estuvo preparando el coche la noche anterior, la idea era trasladar el coche en un remolque hasta la carrera, pero en el último momento Dean cambió de idea y prefirió llevarlo conduciéndolo. Rolf Wütherich iba como copiloto y tras ellos en otro coche iba Hickman  y el fotógrafo Stanford Roth, quien aún no sabia que iba a documentar la muerte de Dean.
Se supone que cuando ocurrió el accidente llevaban un exceso de velocidad ya que ambos  vehículos fueron multados por circular a 100 km/h en una zona  de 90, estó ocurrió a las 15,30 en el condado de Kern.
Repostaron en una gasolinera en Lost Hills, en la ruta 466, cerca de Cholane, entre las 17,30 y 17,45 ocurría el accidente, colisionaba frontalmente con un Ford Custom Tudor Coupé que se saltó un ceda el paso que no vio el coche de Dean, tal como declaró a la policía el conductor, Donald Turnupseed.
Supuestamente no vio el coche de Dean al ser de muy poca altura y color gris con lo que se pudo  camuflar con el asfalto.
Dean dijo a su copiloto que el ford les había visto y que tenía que parar, y por tal motivo no bajó su velocidad.
Según relató Turnupseed pudo ver claramente un cuerpo salir lanzado sobre el parabrisas de su Ford, lo que demuestra la velocidad alta a la que ocurrió la colisión.
Por la forma del golpe en ambos coches, se demostró que no fue totalmente frontal, lo que indica que cuando Dean entró en el cruce, el Ford aún no lo había hecho y por tanto fue éste el que embistió al Porsche de Dean.
Dean y Wütherich salieron volando, Wütherich acabó en la cuneta con algunos huesos rotos y recuperando la consciencia días después en el hospital.
Dean voló hasta el Ford para luego quedar de nuevo dentro del Porsche, fue declarado oficialmente muerto a las 17,59.
Hickman que iba con el coche del remolque detrás, le sacó del Porsche, afirmando que murió en sus brazos antes que llegara la ambulancia.
Una semana antes Dean le enseñó el coche a Alec Guinness y éste  notó algo siniestro en ese coche, diciendo literalmente a Dean “si te subes a ese coche te encontrarán muerto en él de aquí a una semana”
Este es el comienzo de la maldición del Porsche Spyder de Dean.
También Eartha Kitt, amiga de Dean le insistió en que debía deshacerse de ese coche, Ursula Andrés se negaba a subir al coche, George Barris propietario del taller donde pusieron el coche a punto tuvo una mala sensación cuando lo vio saliendo del taller conducido por Dean.
Von Dutch, era  un empleado del taller, mientras se preparaba para pintar el logotipo “Little Bastard” la misma mañana del accidente, al coche, que estaba aparcado en su lugar se le soltó una marcha y se fue solo hacia delante, golpeando la pared del taller y rompiendo el intermitente  izquierdo, que no se reparó porque después de la carrera  iba a volver el coche al taller.
Después del accidente, lo que quedó del coche fue trasladado a la granja del tío de Dean, Marcus Winslow.
George Barris compró el coche y se lo llevó a su taller sin motor ni transmisión, piezas que Marcus había vendido antes  a dos médicos que las querían instalar en sus coches, también vendió las ruedas traseras.
Poco después, el médico que instaló en su coche el motor de Dean, se salía de la carretera con el coche, chocaba contra un árbol y moría en el acto.
El otro médico volcaba con el coche en el que instaló la transmisión de Dean y quedaba parapléjico.
El que compró las ruedas traseras, le estallaban ambos neumáticos en una carrera y moría en el accidente.
La patrulla e carreteras de California, alquiló el Spyder de Dean para mostrarlo en varías localidades como ejemplo de las consecuencias de los accidentes de  tráfico, en esa  gira sucedieron varias cosas extrañas.
En Fresno, el edificio donde estaba expuesto el coche, ardió por completo y solo quedó intacto el propio coche.
Mientras remolcaban el coche a San José, una de las puertas se soltó, cayendo sobre un mecánico, rompiéndole la pierna.
En la escuela de Sacramento, donde se expuso después, el coche se soltó de nuevo y rompió la cadera a un estudiante.
Poco después, un ladrón quiso llevarse el volante de recuerdo, rompiéndose el brazo en el intento.
En otro traslado, el conductor del camión donde se llevaba el coche, tenía un accidente, salía despedido de la cabina y el coche maldito le caía encima aplastándole y sumando una nueva victima,
En una segunda ocasión se volvió a repetir lo mismo, en otro  traslado, en otro camión, y causando otra muerte mas.
En una tercera ocasión, estando el coche cargado en el camión, y éste estacionado. Al camión le fallaron los frenos aplastando a un coche aparcado, con el Spyder subido a él.    
En otra ocasión, un individuo que había robado una pieza del coche como recuerdo, llamaba a George Barris suplicándole que aceptase su devolución porque desde que la había cogido había perdido su trabajo, su casa, a su mujer, su hijo y se encontraba ingresado en el hospital con una enfermedad mortal contagiosa.
En 1959, terminaba la gira del coche y era devuelto al taller de Barris en un container sellado en un trailer. Cuando abrieron el container el coche había desaparecido.
Diez años después, Barris contrató al investigador privado J.J: Arms para saber que pasó con el coche. Tras la investigación se dedujo que el coche no había sido cargado nunca.
Tiempo después se ofreció un millón de dólares por el coche pero nunca apareció.
Según se rumorea, la maldición del Spyder es responsabilidad de Maila Nurmi, una actriz nacida en Finlandia que hizo carrera en Hollywood, en los tiempos en que Dean alcanzó la fama, Maila era su novia, y según se cuenta, una vez que Dean se convirtió en estrella  rompió su relación con Maila.
El dinero destinado a la compra de la casa  de ambos fue invertido en la compra del Porsche Spyer, por este motivo Maila maldijo el coche que terminó por llevar a la muerte a Dean.